Lo ideal es que estemos lo más tranquilos posibles con esta situación ya que el miedo baja nuestro sistema de defensas y sería una puerta abierta a cualquier patógeno, por lo que las primeras recomendaciones van entorno a nuestro centro.
- Meditar a diario y hacer un ejercicio de introspección con la pregunta ¿Cómo me encuentro hoy? ¿Que necesito? Nos hará valorar nuestro estado para así tomar remedios de ajuste.
- Hacer pequeños ejercicios de yoga o pilates, nos ayudará a mantenernos ágiles, flexibles y eliminar esas tensiones.
- Hacer varias respiraciones profundas a lo largo del día, equilibrará nuestro sistema nervioso y calmará la ansiedad que nos produce la situación.
- Dormir las 8 horas necesarias para dejar que el cuerpo se repare.
Como medidas de higiene añadir unas gotas de aceite de árbol del té en nuestro jabón líquido ecológico para desinfectar las manos cada vez que volvamos de la calle y todas las recomendaciones sanitarias con respecto a esto que las autoridades nos han comunicado.
También tenemos que hacer mucho hincapié en la forma de comer, que comemos, como lo cocinamos y como lo comemos, pues la primera es una de las recomendaciones más importantes.
- Masticar mucho los alimentos, ya que en la saliva tenemos la capacidad de neutralizar bacterias y además de alcalinizar nuestros alimentos antes de que se transformen en nuestro organismo.
- En la medida que se pueda consumir alimentos ecológicos es la mejor opción, ya que el organismo no tiene que trabajar para deshacerse de todos los productos químicos y tóxicos que lleva una alimentación convencional, si no, simplemente los utiliza para nutrirse, tanto emocional, energética y físicamente.
- La alimentación tiene que ser muy sana y equilibrada, debemos retirar todos los alimentos procesados, sobretodo postres, dulces, harinas blancas y chocolates. En cambio debemos potenciar una buena cantidad de verduras de hoja verde y de raíz, como las acelgas, repollos y coles, hinojos, puerros, zanahorias, boniatos, calabazas, setas de todo tipo...
Los cereales más recomendables son el mijo, la quinoa, el arroz integral y el trigo sarraceno, siempre prefiriendo la opción en grano.
Otro de los grupos de alimentos muy importantes son las legumbres, sobre todo teniendo especial atención las judías, alubias rojas, azukis, ya que equilibran nuestra energía y ayudan a la capacidad de recuperación y claro quién se resiste a ese gran plato de cuchara que nos hacían las abuelas, volvamos a recuperarlo y cocinemos para ayudar a subir nuestro sistema inmune. En su remojo poner una pizca de alga kombu o espagueti de mar para que sean mucho más digeribles y también limpien nuestro organismo.
Los productos fermentados como el miso, pickles o chucrut tomados a diario ayudan a nuestro intestino a tener una correcta microbiota, la cual es nuestra gran barrera de defensas.
Como alimentos a evitar también las frutas crudas, ya que dispersarían nuestro calor interno, la mejor opción para consumirlas es en compota sin azúcares añadidos.
- Ahora que todavía apetecen infusiones las más recomendables son las de plantas como tomillo, salvia, regaliz, te kukicha o jengibre con limón. Si queremos podemos introducir una ciruela umeboshi ya que evita que nos contagiemos si tenemos familiares con el virus, dependiendo de la condición de la persona se podrá tomar 1 entera, media o 1/4 de ella.
Si después de estos consejos queremos aun así reforzar nuestro sistema inmune con algún complemento alimenticio podríamos tomar extracto de equinacea, vitamina C o extractos de setas shitake o rehisi.
Espero que os sirva de ayuda y todos a subir esas defensas!. Alicia.
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